COMPETIDORES MEXICANOS EN EL ACEITE DE OLIVA.


¡Buenos días blogger@s! Hoy desde la clase de Comercio Internacional de la Escuela Profesional Xavier vamos a analizar la competencia del mercado del aceite de oliva en México. Esperamos que no os aburra mucho y que Óscar nos apruebe... ¡adelante! 

Fuente: Google Imágenes
El mercado mexicano es un mercado bastante curioso a la hora de exportar. Pero antes de empezar a analizarlo vamos a hablar de la figura del empresario mexicano. Es una persona muy arraigada en sus costumbres. Le encanta hablar sobre sus tradiciones y su cultura,  así como escuchar curiosidades de otras culturas. 
Son personas fáciles de acceder (de corazón caliente) a las que les encantará establecer una relación amistosa y de confianza a la hora de que venga un empresario de cualquier nacionalidad a tratar con ellos sobre negocios (si no hay relación no negociarán). Tras el posible cierre de alguna operación, es muy importante seguir manteniendo esa relación amistosa, así como celebrar el cierre de tratos en algún restaurante.
Pero ojo: Son muy autoritarios, con lo cual siempre tendrás que mostrar respeto sobre ellos y su cultura; además de darles siempre a entender que son ellos los que dirigen la operación (aunque no sea así). No obstante, no les gusta decir "no" para no defraudar, siempre se irán por las ramas antes de darte la negativa directa.

Algunos detalles técnicos: Ser puntual y confirmar con antelación las reuniones (y posibles imprevistos). El uso de tarjetas de visita y catálogos de tus productos siempre viene bien.

 Los empresarios centroamericanos se caracterizan por usar siempre el título de cada persona seguido de su apellido (Ej: Licenciado Ramírez, Doctor García,...). Su primer saludo siempre será un apretón de manos seguido de uno de los títulos antes mencionados. Cuando se tenga más confianza entre ambas partes se podrá usar el nombre de pila e irán a saludar con un abrazo.

Ahora que ya sabemos un poco más de esta cultura, vamos a centrarnos en los competidores mexicanos de nuestro sector, el aceite de oliva.

Antes de nada, decir que la producción local es casi inexistente y las importaciones cubren casi el total del consumo. En cuanto a importadores, el principal es España con una cuota sobre el total de imports del 70%. Le sigue en la cola Italia, pero pierde terreno por la ventaja geográfica y logística que proporciona España. El consumidor mexicano ve nuestro producto como un bien de alta calidad y su "made in Spain" tiene un gran reconocimiento entre los consumidores.

Antes de proceder con las operaciones comerciales con México, es indispensable conocer y cumplir la Norma Oficial Mexicana (NOM-006-FI-TO-19951), por la que se establecen los requisitos aplicables a la importación que deben cumplir los vegetales y sus productos.

Y en cuanto al etiquetado, el producto deberá contener, según lo estipulado por la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (NOM-051-SCFI/SSA1-20101), información general del producto, grasas totales, colesterol y valores nutricionales; además de su lugar de origen, lote y fecha de envasado y de caducidad.

Falta mencionar que desde el 1 de julio de 2009 las importaciones de aceite de oliva quedaron libres de arancel, el IVA aplicable es cero y se eliminó el sistema de cuotas compensatorias, lo que facilita la importación de este producto en el mercado mexicano.

Algunos distribuidores mexicanos de productos españoles, entre lo que destaca el aceite de oliva, son:
Blessedbeexport, empresa mexicana especializada en distribuir jamones ibéricos y resto de embutidos, aceite de oliva "puro español" y vinos con denominación de origen.
Aceites naturales y quimicos Floga, S.A. Importadores de aceites tanto químicos como para la alimentación.

Como conclusión, decir que México es una gran oportunidad de negocio para exportadores españoles, puesto que la competencia local es casi inexistente. Nuestro aceite de oliva está muy bien posicionado y eso nos da una gran ventaja frente a países competidores como Italia.
¿Estáis preparados para esta aventura comercial?


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